sábado, 21 de junio de 2014

The Road Goes Ever Harsher: How To Train Your Dragon 2


La primera parte de Cómo Entrenar A Tu Dragón fue una película importante la década pasada. Fue la cinta que mostró que DreamWorks Animation era capaz de brindar una producción con una calidad equivalente al entonces intachable Pixar, no sólo en sus impresionantes logros técnicos sino en un guión que a pesar de contarnos una historia ya vista antes, poseía un carácter épico y emotivo como pocas animaciones. También ganó un Óscar muy merecido a Mejor Música para John Powell. También parte de esa banda sonora fue tema de entrada en la boda de mi hermana. En fin. Tras ser anunciada poco tiempo después del éxito de Como Entrenar A Tu Dragón, finalmente llega la segunda parte de lo que se dice es una trilogía planeada. El afecto a la primera película generó expectativa y a la vez una cierta seguridad de que sería muy poco posible repetir, ya no se diga superar el buen recibimiento de su antecesora.
No hay mucho que temer sin embargo, porque esta segunda parte cuenta con la misma calidad en cada aspecto con la que gozó la parte uno. Cómo Entrenar A Tu Dragón 2 presenta a su protagonista Hiccup y sus amigos ya crecidos, ahora todos jinetes de dragones, aprovechando la paz que su pueblo Berg finalmente ha logrado conservar tras su alianza con las criaturas. Es el mismo carácter aventurero y en parte rebelde de Hiccup, el que ocasionará que se pongan en marcha eventos que volverán a afectar todo cuanto conocen, a la vez que varias revelaciones son hechas sobre el pasado de los protagonistas.


Como no suele ocurrir en una secuela animada, Cómo Entrenar A Tu Dragón 2 presenta una historia más oscura, recordando por momentos todas las buenas segundas partes que aumentaron la complejidad de la historia que contaban. No que sea forzado, porque el guión busca sin duda reflejar la vida real, donde el permitirse a sí mismo avanzar en el camino a medida que uno crece, hace que el panorama de ese camino se vaya tornando más hostil a cada paso. La primera parte no escatimó en ser arriesgada en mostrar consecuencias permanentes producto de las decisiones buenas o malas de sus protagonistas, y aquí se repite dicho acercamiento. Son esos momentos agridulces, o la tensión que uno siente en varias escenas de la cinta sin darse cuenta, lo que elevan a esta franquicia del resto de las producciones animadas recientes. En ocasiones también los diálogos de algunas escenas son brillantes, como el momento del reencuentro del padre de Hiccup con la esposa que creía muerta. Es una escena tan íntima como cuidada en la misma forma que lo es un duro evento que ocurre y el cual fácilmente podría haberse manejado en una forma rápida y torpe por ser una animación, pero la emotividad genuina que posee cuestiona la habilidad de directores en otras películas live-action (recordando específicamente a Thor 2) para tratar este tipo de escenas.


No deseo que les parezca que todo es melodrama y tensión en Cómo Entrenar A Tu Dragón 2, pues también esta cuenta con momentos bastante alegres y mucho escapismo. Las escenas que retratan la relación entre Hiccup y Toothless son de las mejores que podríamos encontrar en el cine sobre la amistad entre animal y un hombre (mucho del comportamiento de los dragones con sus dueños pareciera en gran parte representar la relación abnegada de perros con sus amos). La animación es llevada a tremendos niveles: el realismo en escenas de batalla y las apariciones de los dragones más grandes, los harán olvidar por momentos que es una película animada.
John Powell está de regreso para musicalizar la segunda aventura de esta saga, y lo hace tan acertadamente como antes, si bien creo que nunca podría derrotar su propia genialidad en el primer soundtrack. Un pequeño fallo es la inclusión de una versión de su tema para la primera película ahora con Jonsi como intéprete para una de las primeras escenas. No que la canción sea pésima, pero carece del mismo nivel de calidad con el que goza la cinta en el resto de sus áreas, y es notable al sentirse un tanto intrusiva con el resto de la banda sonora.
Sería injusto tratar de afirmar si es mejor o inferior a su primera parte, porque ser la película que supo atraernos a este mundo por primera vez es bastante peso, pero baste decir que Cómo Entrenar A Tu Dragón 2 de las mejores, si no la mejor de las secuelas animadas hasta ahora, y un suceso que no debe de perderse en el cine este año.